domingo, 19 de julio de 2009

La historia de Will séptima parte "El Héroe"

Will analiza la situación y decide optar por la opción de pedir ayuda siempre y cuando no lo consiga esta noche. Después de fracasar inútilmente 2 noches anteriores para salir del orfanato a escondidas, sale por última vez , esta vez sin la lámpara, por la razón de que ya no le queda mucha batería y hoy solo realizara una inspección del lugar para salir mañana o pedir ayuda, baja por las escaleras y busca algún otro lugar que no haya revisado la noche anterior, alguna ventana que este floja o un pasadizo secreto, mientras piensa -“creo que la ventana es más fácil de encontrar” -, inútilmente no encuentra nada, ningún defecto, el señor Anderson tomo medidas después de que Esmeralda llego al orfanato, así que Will decidió regresar a la cama.
-“Te estaba esperando”- salió una voz de un niño antes del llegar a los dormitorios-“me pregunto porque esta vez no saliste con la lámpara, hubiera sido más fácil de hallarte abajo”.
Al final sentados en un en la comodidad de las sillas de estar del orfanato estaba Will y un niño al que su memoria no podía localizar.
- “Me molesta no saber quién eres”
-“Descuida chico, en cambio tuyo yo soy más educado, mi nombre es Rafael y voy a mostrarte la forma de salir de aquí”
-“¿Cómo sabes que me quiero escapar? ¿Quién eres? ¿Por qué quieres ayudarme?”
-“wow tranquilo chico, es obvio que quieres escapar, nadie tarda tanto en ir al baño. Además desde que escuchaste a la niña rara y le abriste la puerta, te he estado vigilando, eres muy curioso sabes”
-“¿Vigilarme? ¿Por qué lo haces? ¿Qué haces aquí?”
-“¿Acaso solo sabes decir preguntas?, cálmate, te sacare de aquí, pero tienes que prometer que no volverás”- Will medito la oferta y al cabo de un rato se fue subiendo las escaleras al dormitorio”
-¡oye!, ¿A dónde vas?- dijo el niño preocupado-“voy por mis cosas, nos vamos de aquí ahora”- contesto Will con una cara pensativa.

Al cabo de un rato Will bajo con una mochila improvisada con la sabana y con la lámpara en una mano.
-“antes de irnos, quiero que conteste a todas mis preguntas y quiero la verdad”
-“andas cabreado, está bien pero te lo contare adentro de ahí, no quiero que nos descubran”- el niño señalo el almacén que está debajo de las escaleras. El niño saco una llave y con una sonrisa picarona abrió la puerta.
-“¿Cómo diablos es que tienes una llave de ahí?”
-“es oficial, solo sabes hacer preguntas verdad”- dijo el niño mientras Will fruncía la cara.

Una vez adentro el niño movió unas cajas y encontraron otra puerta a que tuvo que ser forzada con otra llave, un simple giro a la perilla y mostro una habitación llena de camillas y correas, de jeringas y bolsas, parecía un hospital abandonado.

-“Es desde aquí donde vamos a escapar”- la expresión de Will obviamente mostraba asombro y desconcentración, surgieron miles de preguntas en la cabeza de Will pero se limito a esperar a que se respondieran solas.

-“No sé si sabias”-dijo el niño- “pero el señor Anderson es casi tan nuevo como tú en el orfanato”- Will se quedo sorprendido al escuchar la noticia y sus preguntas no pudieron ser contenidas-“¿y qué tiene que ver eso con todo esto? “- “tranquilo, te contare”

-“Hace mucho tiempo, este orfanato era conocido por resguardar niños de todo el mundo para la sádica satisfacción del dueño del lugar, le gustaba hacer experimentos con los niños y si algo salía mal nos golpeaba y maltrataba. Nadie sabía de qué se trataban exactamente sus experimentos, pero siempre terminábamos lastimas, el nombre de orfanato solo sirvió como fachada para encubrir sus retorcidas ambiciones.

Hubo una ocasión en la que me amarro a esa camilla y me empezó a inyectar muchas cosas extrañas, me hacía sentir de diferentes maneras pero cuando salió los resultados me empezó a golpear hasta que las correas se soltaron y termine en el suelo inconsciente, al parecer no le dio importancia eso, cuando desperté solo en aquella habitación descubrí que tenía una puerta secreta, ahí guardaba todos sus químicos raros y aquellas cosa que usaba en nosotros, trate de ocultarme, en mi desesperación vi que había otra puerta que conducía afuera en la parte del bosque del orfanato, después vi como el viejo loco venia con una jeringa y unas correas, lo empuje y se le encajo la jeringa a él solo empezó a temblar, hasta que se detuvo, después de eso vino la policía. Después de los hechos mandaron a llamar al sucesor del orfanato, el único hijo del señor Stone, así es, el señor Anderson es el hijo de antiguo dueño del lugar. Al parecer el señor Anderson no sabía nada de lo que hacía su padre en el orfanato, así que solo decidió cerrar bajo llave el laboratorio y olvidar este horrible capitulo de vida. Al poco tiempo al orfanato le empezó a llegar padres de familia y poco a poco fueron adoptando a todos, al final solo quede yo, el orfanato se convirtió en un lugar famoso por tener niños de todas las regiones del mundo, actualmente le llegan niños de todos lados, es por eso que no son muy sociables entre sí, olvidar su antigua lengua y aprender otra toma su tiempo, aunque tu tuviste suerte, eres de aquí.”

La cara sorprendida de Will sobrepasaba sus límites, todo era una increíble historia pero algo no cuadraba-“si tantos deseos tenias de irte ¿Por qué no te fuiste antes?”-

-“parece que te gustan las preguntas chico, como ya había dicho, después de la llegada del señor Anderson todos los niños fueron adoptados menos yo, así que nadie quiere largase, y no es que no me guste este lugar, es solo que me trae muy malos recuerdos”

Will comprendió lo que le quiso decir y decidió irse de ese lugar con él.

-“Mi nombre es Will, Will Hanson”-“El mío es Rafael chico, pero todos me solían decir Rafa”-dijo el niño con cierta melancolía-“un placer rafa”-sonrió Will.

Así los dos niños decidieron partir de ese lugar, rafa le mostró a Will la puerta que le había mencionado en su historia, y al final de aquella escalofriante habitación estaba la puerta que mencionaba, era una puerta vieja con un seguro de perilla sin asegurar, los niños la abrieron y salieron a la luz de la luna de esa noche.


Will hurga en su pantalón y saca la carta que le envió Esmeralda, no conocía muy bien las calles pero recuerda que de camino al orfanato la primera vez visualizo calles con el nombre de escritores famosos, la calle era Martin Armstrong y el número de la casa era el 7B, supondría que llegaría sin muchos problemas.

-“¿Qué es eso chico?, una carta de Amoooor”-dijo Rafa con afán de tranquilizar el denso ambiente de la noche. Will se detuvo y miro fijamente a los ojos a Rafael.-“Rafa, gracias por lo que hiciste esta noche pero hay algo que tengo que hacer solo y es lo que me motivo a salir”- La cara de Rafael se torno seria por un segundo y después regreso su peculiar aspecto -“si entiendo, vas a ver a esa chica verdad, de todos modos tenía planes que no te incumbía, ojala tengas suerte, ten por seguro que nos volveremos a encontrar”- Dijo rafa mientras se alejaba corriendo por el bosque. Will sonrió y deseo que se encontraran de nuevo.

Esa noche Will camino por el bosque, sin ningún rumbo, sin ningún sentido, y cuando el mismo sueño le gano durmió a las sombras de unos árboles frondosos, cuando llego el día siguiente despertó mirando al orfanato, porque sería la última vez que lo haría, “nunca pudo quemar ese maldito patio trasero” se dijo mientras reía y se encaminaba a su lejano destino.

No recuerda cuanto tiempo camino, ni cuanto estuvo buscando, pero estaba oscuro y Will termino encontrando la casa de Esmeralda, melancólicamente era una casa muy parecida a su antiguo hogar, cuando Will todavía vivía con mamá y papá, pero no dejo que los recuerdos lo molestaran, porque hoy va a rescatar a esmeralda.

Will siempre fue un niño muy listo, siempre fue un niño raro, siempre creyó que tal vez eso era malo, pero hoy demostrara que es algo bueno y que estaba orgulloso de lo que era.

La mochila improvisada venia cargada con muchas cosas raras, una de ellas era cinta adhesiva, la fue colocando por toda la ventana que aparentemente apuntaba a la cocina y cuando la ventana está completamente cubierta por la cinta la golpeo, la cinta adhesiva absorbió todos los pedazos y todo el sonido, ahora solo le faltaba salir con Esmeralda. Guardo sus cosas entre ellas el libro de cuentos que siempre leía por las noches y que esta noche lo volvería a leer con Esmeralda, busco cuidadosamente en los lugares y encontró una puerta peculiar en el primer piso, como si la acabaran de poner, si en algún lugar esta esmeralda estaría ahí, quito un seguro que aparentemente solo se puede quitar de ese mismo lado y abrió la puerta y encontró a esmeralda dormida, -“si los ángeles existen se depositaron en el cuerpo de esmeralda”-pensó Will cuando la vio dormir y cuando estaba a punto de despertarla escucho los pasos de unos pies que bajaban las escaleras. La sangre de Will se acelero como nunca lo había hecho en su vida, se oculto detrás de la puerta y espero la llegada del ser con una de las jeringas que saco del laboratorio aquella noche, NADIE NUNCA MAS APARTARÍA A ESMERALDA DE SU VIDA, el cuerpo se detuvo y lentamente entro a la habitación mientras decía:- “¿esmeralda está todo bien haya adentro?”- Will se abalanzo sin pensar sobre la persona que había pronunciado aquellas palabras, si Esmeralda le había pedido ser rescata, seguramente fue de su papá. Algún alcohólico y desgraciado ser que quería abusar de ella seguramente. Will enterró suavemente la jeringa en la espalda del papá de Esmeralda y apretó introduciendo lo que sería como 5 mililitros de aire a su cuerpo, nunca más volvió a pronunciar sonido alguno más que el pump de la caída de un cuerpo muerto, después de eso su respiración se calmo y arrastro el cuerpo lejos de ahí, no quería que esmeralda viera el desastre que estaba provocando, después cuando lo termino de ocultar en la sala detrás de un sofá volvió a oír a otra persona diciendo :-“cariño, todo está bien, esa mocosa te está causando problemas”-“ ¿MOCOSA?”-dijo Will mientras se le abalanzaba a la madrastra de Esmeralda-“NADIE le dice MOCOSA a Esmeralda ¿oíste?”- decía Will mientras metía y sacaba la jeringa que anteriormente había sido utilizado para matar al papá de esmeralda, la sangre del Will estaba en el tope, la adrenalina lo había apoderado, el cuerpo de la mamá de esmeralda era apenas reconocible, después de eso Will lloro incontrolablemente pero algo dentro de él disfruto cada momento en el que clavaba la aguja en el cuerpo y cuando por fin se calmo, con la ropa manchada de sangre, con la jeringa aun en la mano, camino lentamente al cuerpo dormido de Esmeralda y zangoloteando su hombro diciendo: “HE VENIDO A RESCATARTE ESMERALDA”.

2 comentarios:

  1. No juegues!!!!

    Como que le haces eso a Will??!! Pero muy bueno, la verdad te mereces un gran aplauso (bravoooo!!!) jiji :P

    kuidate besitos, byenii!!!!!

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  2. Hey buena historia dejame decirte, aunque tambien a veces si me confundo, solo poco pero quitando eso la historia es buena.

    Me gustó mucho el final. Mmm...

    Sigue así que ya esperare la segunda temporada, vale cuidate.


    Oh si, tiene dos horas de diferencia menos google. Que loco.

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